jueves, marzo 28, 2013

La unidad que desune. Una reflexión sobre los comentarios de Lech Walesa

La unidad que desune. Una reflexión sobre los comentarios de Lech Walesa
[28-03-2013]
Eriberto Liranza Romero
Periodista Independiente

(www.miscelaneasdecuba.net).- Las declaraciones de Lech Walesa subieron
de tono el tema referente a la unidad en días pasados. Analistas
políticos de dentro y fuera de la isla expresaron sus puntos de vistas.
Después de repasar algunos artículos sobre este particular, Walesa
podría apreciar que sus "consejos" sobre la "falta de unidad" de la
oposición cubana, logró unir en una sola voz a la mayoría de los líderes
cubanos para decirle que estaba equivocado.

Es cierto que la oposición al régimen castrista no es lo suficientemente
fuerte ni lo poderosamente unida como quisiéramos los que día a día
formamos parte de ella. Muchos factores adversos han impedido a los
demócratas cubanos obtener la victoria sobre el comunismo caribeño.

Cómo primer obstáculo está la policía política del régimen, quienes
emplean cuantiosos recursos del estado para socavar cualquier
manifestación contraria a la del gobierno, por muy insignificante que
esta parezca. Esta represión busca no solo amedrentar e intimidar al
activista, también impedir mediante "escarmientos" que el pueblo se una
a la disidencia interna.

Cada grupo ha ido madurando con el paso de los años. Unos han crecido
más que otros pero cada uno de ellos convirtiéndose en verdaderos
quebraderos de cabezas para el régimen. Por eso no puedo estar de
acuerdo con la idea de que la oposición cubana no está unida.

Unidad no significa uno.

Otra de las causas que impide ver cuán unidos estamos, es la falta de
comunicación y las libertades que a diario nos conculca la dictadura.
Las pocas veces que me he podido escapar y viajar al interior del país,
he visto en una sola actividad a más de 40 personas de diferentes
organizaciones gritar la misma consigna: Libertad y Democracia. He ahí
la unidad, en pensamiento y acción.

No creo que haga falta una mega organización dirigida por un súper líder
al que se le abra el grifo de los recursos y dirija desde un rincón de
la isla. Lo que funcionó en Polonia no tiene por qué servirnos acá. No
tenemos un pueblo fervientemente católico, una iglesia que nos de abrigo
ni un Papa polaco, pensar en un sindicato independiente con un gobierno
que desemplea a cualquier obrero que disienta, es una falacia.

Si observamos con ojos autocríticos veremos que en la oposición seguimos
siendo minoría, a pesar de que gran parte de la población nos apoya y sé
que quisiera estar de nuestro lado. Pero no se unen a nosotros.

Un movimiento se concibe en la mente y luego se comienza a ganar
seguidores. En mi opinión es ahí donde está la raíz del problema, en
cosechar lo que otro sembró. No hace falta desmembrar este o aquel
movimiento que tiene su historia, su sede, su gente, y son parte de la
sociedad civil. Con este proceder solo seríamos un solo movimiento con
los mismos opositores, pensando u obedeciendo una misma idea, además de
convertiríamos en un solo objetivo para el régimen.

Ahí fuera hay un pueblo hastiado del discurso del régimen, y lo poco que
le han permitido escuchar del nuestro, no les ha motivado a seguirnos, a
crear la verdadera unidad, la de atraer a las masas populares.

Podemos llegar a las personas con mensajes que quieren escuchar, con
proyectos sociales que vinculen a la oposición con lo que al pueblo le
interesa, a mi parecer, la familia. Tenemos proyectos de cambio, de
industrias, de gobierno, pero van dirigidos a la lente de una cámara,
YouTube, o alguna ONG en el exterior.

Las sociedades son diversas y la cubana no es la excepción. Cuba ha
aprendido mucho de su diversidad como para pretender cambiarla, tenemos
la mal formación de correr antes de aprender a caminar.
Hoy, para vergüenza del castrismo, somos Liberales, Republicanos, LGBT,
Conservadores, Socialistas, Democristianos, Ecologistas, y más. Por
suerte el experimento social del comunismo salió mal, no somos iguales.
Es en el respeto al derecho ajeno, en el pensamiento ajeno y en la
organización ajena donde está la verdadera unidad.

http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=38934

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