Un día que vivirá en infamia en la historia de Cuba
[30-07-2015 01:43:10]
Marta Menor
Presidenta de Cultivamos una Rosa Blanca
(www.miscelaneasdecuba.net).- El asalto al cuartel Moncada el 26 de
Julio de 1953, 62 años atrás, es un día que vivirá en infamia en la
historia de la República de Cuba. Tres generaciones de cubanos hemos
pagado un precio muy alto como resultado de aquel día cuando un
oportunista dice haber encabezado el asalto al cuartel de Moncada, un
asalto que duró veinte minutos.
Según el periodista Robert Taber publicó en "M-26: The Biography of a
Revolution", Fidel Castro, notorio por su memoria y su verborrea, jamás
ha descrito en detalle su participación en el combate del Moncada.
Nunca ha revelado si disparó un arma, cuantas veces, cuando, o contra
quien, ni jamás ha dicho que entró en el cuartel en aquel momento. De
los 99 rebeldes sobrevivientes, veintisiete se convirtieron en
disidentes, por lo cual han sido omitidos de la "historia oficial".
Abel Santamaría al cual Fidel llamó el alma del Movimiento murió en el
atentado; de Raúl no se sabe mucho que fue lo que hizo si es que hizo
algo y Fidel huyo de la escaramuza cuando esta había comenzado. Unos
días después fue sorprendido y salvó la vida gracias al sargento del
ejército batistiano que lo detuvo. Veintidós meses después fue dejado
en libertad por el propio dictador Fulgencio Batista que firmó su amnistía.
En 1952 cuatro años más tarde del famoso "Bogotazo", Fidel Castro
denunció a Batista ante un Tribunal de Urgencia de La Habana por la
violación der la constitución argumentando: ¿Cómo podrá después este
tribunal juzgar a un ciudadano cualquiera por sedición o rebeldía contra
este régimen ilegal producto de la traición impune? Años después en 1959
solo a 10 meses más tarde de tomar el poder acusaría al Comandante Huber
Matos miembro del Movimiento 26 de Julio y héroe guerrillero de la
Sierra Maestra de sedición por renunciar al no estar de acuerdo con el
camino dictatorial que llevaba el movimiento, siendo condenado a 20 años
de prisión.
En 1957 escasamente dos años antes de llegar al poder Fidel firmó el
Manifiesto de la Sierra Maestra en la que se comprometió a "celebrar
elecciones generales para todos los cargos del Estado, las provincias y
los municipios en el término de un año bajo las normas de la
Constitución del 40 y el Código Electoral del 43 y entregarle el poder
inmediatamente al candidato que resulte electo "en el evento de que su
movimiento llegase al poder". Después del triunfo de la revolución,
Fidel también traicionaría esa promesa diciendo "elecciones, para qué".
Durante la dictadura de Batista los comunistas – Partido Socialista
Popular (PSP) - mostraban una actitud ambigua hacia el Movimiento 26 de
Julio hasta que se dieron cuenta que el triunfo de los revolucionarios
era inminente y mandaron a uno de sus dirigentes a hacer acto de
presencia en la Sierra Maestra.
En 1961 el PSP se fusiona con el Movimiento 26 de Julio y otras
organizaciones para formar las Organizaciones Revolucionaras Integradas
(ORI) y depurarlas "de los errores del sectarismo". En 1962 son
unificadas con el Partido Unido de la Revolución Socialista de Cuba
(PURSC) constituyéndose finalmente en el Partido Comunista de Cuba (PCC,
partido único) que celebrara el VII Congreso del PCC el próximo 16 de
Abril de 2016.
Inmediatamente después del triunfo, el régimen castrista condenó a
docenas de cubanos al paredón sin ser juzgados por ningún tribunal y se
llevaron a cabo circos romanos donde se juzgaba y se fusilaba ante las
cámaras de cine, de televisión y un público enardecido olvidando que su
líder había salvado la vida gracias al militar que lo tomó preso y más
tarde dejado en libertad por una amnistía firmada por el mismo Batista.
Uno de esos casos de fusilamiento sin causa sucedió en la madrugada del
18 de Enero de 1961 cuando fueron fusilados en la Cabaña los miembros de
la Compañía Cubana de Electricidad William LeSante, Julio Costellanos y
Urbano Pérez por haber participado en una protesta pública por las
calles de La Habana la tarde anterior condenando la cesantía de varias
decenas de compañeros de trabajo y el nombramiento por decreto del
régimen revolucionario de una directiva sindicalista comunista ocurrido
ese mismo lunes, 16 de enero de 1961. Mi hermana y yo estábamos
presentes en esa protesta pública habiendo siendo parte de las que
dejaron cesantes sin causa ni motivo. Mi hermano, dirigente sindical
del Sindicato de Plantas Eléctricas. Gas y Agua, había tenido que pedir
asilo político en Nueva York un mes antes. Así de simple la familia se
separaba, perdíamos trabajo, compañeros y amigos.
Fidel traicionó al Movimiento 26 de Julio y traicionó al pueblo cubano
más tarde. Este 26 de Julio, 58 años después de la firma del Manifiesto
de la Sierra Maestra cubanos, unos dentro de la Isla y otros dispersos
por el mundo, separados por el maquiavelismo de un ego maniático,
siguen esperando por esas elecciones donde el candidato nominado
libremente que resulte electo por el pueblo en elecciones libres y
democráticas tome el poder. ¿Hasta cuándo?
Source: Un día que vivirá en infamia en la historia de Cuba -
Misceláneas de Cuba -
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/Article/Index/55b9650e3a682e133c7fde6a#.VboOCfmqqko
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario