Cuando el amor no alcanza
El socialismo todavía no ha aprendido ni a hacer cerillas
miércoles, diciembre 2, 2015 | Tania Díaz Castro
LA HABANA, Cuba – Así se nombró una pésima telenovela que finalizó hace
unos días por el canal 6 y con un título muy parecido, "Si la chispa no
alcanza", mi colega Ada Oramas escribió una crónica el 18 de octubre en
el periódico Tribuna de La Habana.
Pero mi vieja amiga Ada Oramas no se refería a la chispa del amor, sino
a la chispa de los fósforos cubanos, que a pesar de fabricarse a lo
largo de más de medio siglo en la Revolución triunfante de los
gobernantes Castro I y Castro II, han sido de pésima calidad, como el
resto de los productos industriales del socialismo castrista.
Ante otra crónica aparecida el pasado 22 de noviembre, ¿Por qué los
fósforos no encienden?, también en Tribuna de La Habana y escrita por
Yelena Rodríguez, busco en mi viejo archivo todo lo publicado sobre este
diminuto y banal producto y descubro que después que Raúl Castro pidió
a los cubanos que hablaran con valentía, el 27 de septiembre de 2007,
Ada Oramas ha tocado este tema en más de una ocasión.
Antes, nunca.
Entonces comenzaron a llover las críticas por montones de numerosos
periodistas en la prensa oficialista sobre productos como las malas y
ausentes almohadillas sanitarias para las mujeres, las mochilas
escolares que se rompen en pocos días, el yogur de soya que no gusta a
los niños por su mal sabor, el pan de cada día sin manteca ni sal, los
fósforos que no encienden y un etcétera interminable.
Aun así, tarde pero segura, ¡bravo por mi colega Ada Oramas, quien
comenzó el periodismo al mismo tiempo que yo, allá por las calendas
griegas! No importa que se haya demorado más de medio siglo en decir,
aunque todavía no por lo claro, que el socialismo sea un fracaso, porque
no sirven ni sus fósforos.
Por lo menos, ya se ha manifestado sobre "la incertidumbre que padecemos
antes de encender estas cerillas y la insatisfacción debido a la pésima
calidad del producto".
Al final de su texto tomó fuerzas y ánimo y preguntó, quizás con algún
temor todavía: "¿Podrá la industria dar respuesta al por qué los
fósforos no encienden?"
Luego, en la crónica de Yelena, la Dirección General de la Empresa
Nacional del Fósforo expone unos argumentos que no convencen ni al Bobo
de la Yuca, como decimos en Cuba.
Achaca las culpas a las situaciones medioambientales, a la demora del
mantenimiento de los equipos que comenzó en 2011, al proceso de
producción discontinuo por la alta incidencia del factor humano
–problemas con los trabajadores seguramente por los miserables salarios
que reciben– y otros.
En pocas palabras: el socialismo todavía no ha aprendido a hacer cerillas.
¿Será cierto lo que dice Carlos Alberto Montaner, que mientras el
capitalismo es una prodigiosa máquina de hacer pan, el socialismo es
todo lo contrario?
Sigo buscando en mi viejo archivo y para nada me sorprende que a partir
de los años 1995, 1998, 2000, 2002, 2005, hasta la actualidad, numerosos
periodistas independientes, entre ellos esta servidora, hayamos escrito
sobre los fósforos castristas que no encienden, señores, porque el
socialismo no alcanza.
Source: Cuando el amor no alcanza | Cubanet -
https://www.cubanet.org/actualidad-destacados/cuando-el-amor-no-alcanza/
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario