Andrés Oppenheimer: 'Latinoamérica, ¿más comunista que China?'
DDC | La Habana | 16 Nov 2015 - 6:41 pm.
El periodista revela los datos de un estudio según el cual es más fácil
hacer negocios con China que con algunos países de América Latina.
Un nuevo estudio del Banco Mundial dice que China –gobernada por el
partido comunista– tiene un clima de negocios mucho más amigable con los
capitalistas que Brasil, Argentina, Venezuela y otros países
latinoamericanos, una noticia que según el columnista de El Nuevo
Herald, Andrés Oppenheimer, debería alarmar a toda América Latina en
momentos en que la región necesita urgentemente inversiones extranjeras.
El estudio del Banco Mundial, titulado Haciendo negocios 2016, muestra
que la mayoría de los gobiernos de Sudamérica ponen más obstáculos para
abrir una empresa, operarla o cerrarla que los gobiernos comunistas de
China o Vietnam.
El informe mide a 189 países según la facilidad que ofrecen para hacer
negocios, en escala descendiente. China ocupa el lugar 84 y Vietnam el
80, mientras que Brasil ocupa el 116, Argentina el 121, Nicaragua el
125, Bolivia el 157 y Venezuela el 186.
Algunos de los ejemplos del informe son escalofriantes. En materia de
cuántos trámites legales hacen falta para abrir una empresa, por más
pequeña que sea, en Hong Kong o Nueva Zelanda se requiere apenas un
procedimiento jurídico; en Finlandia, tres y en Estados Unidos, seis.
Por otro lado, se requieren 11 trámites legales en China continental, 14
en Argentina, 15 en Bolivia y 17 en Venezuela.
Medidos en el tiempo que se requiere para cumplir con estos trámites, se
tarda una hora en Nueva Zelanda, un día en Hong Kong, seis días en
Estados Unidos, 31 días en la China continental, 35 días en Paraguay, 50
días en Bolivia, 50 días en Ecuador, 83 días en Brasil, y 144 días en
Venezuela.
No es ninguna coincidencia que varios países de América Latina figuren a
la cabeza de los rankings mundiales de corrupción: cuanto más
formularios hay que llenar para iniciar o conducir una empresa, más
inspectores y funcionarios públicos hay que sobornar para "agilizar" el
trámite.
Y no es casualidad que muchos países de América Latina tienen enormes
economías subterráneas: cuanto más trabas burocráticas se ponen para
abrir una nueva empresa legalmente, más gente decide operar en la
economía informal. En muchos países latinoamericanos, la economía
informal representa casi el 50 por ciento de la economía total.
La formalización tiene muchos beneficios. Las empresas formalmente
registradas tienden a ser más lucrativas, sus empleados reciben
pensiones y otros beneficios sociales, y los gobiernos pueden recaudar
más impuestos, dice el informe del Banco Mundial.
Por suerte, hay excepciones notables: en Chile, Uruguay, Colombia, Perú
y México, el número de procedimientos legales para abrir una empresa se
ha reducido a menos de ocho en los últimos años.
Pero consideremos otro ejemplo que aparece en el informe: el promedio de
días que lleva a resolver una disputa comercial.
En Hong Kong, hacer cumplir un contrato en los tribunales tarda un
promedio de 360 días, en el resto de China 453 días, en Chile 480
días, en Argentina 590 días, en Bolivia y Paraguay 591 días, en
Venezuela 610 días, en Uruguay 725, y en Brasil 731 días. Eso es
buenísimo para los abogados, pero malo para casi todos los demás.
En materia de facilidades para importar o exportar, China gana de nuevo.
En Hong Kong, llenar los documentos necesarios para importar bienes
lleva un promedio de una hora, mientras que en China continental se
requiere un promedio de 66 horas, en Perú y Uruguay 72 horas, en Bolivia
96 horas, en Ecuador 120 horas, en Brasil 146 horas, en Argentina 336
horas, y –esto no es una broma– en Venezuela 1,090 horas, según las
cifras del Banco Mundial.
Mi opinión: Puede que estos excesos de "tramitología" en Latinoamérica
no hayan sido cruciales hace una década, cuando los países sudamericanos
estaban inundados de dinero gracias a los precios récord de sus
exportaciones de materias primas. Pero esos días han terminado.
Ahora, con los precios de sus exportaciones por el suelo y su economía
estancada, la región necesita urgentemente atraer inversiones nacionales
y extranjeras. Para ello, los países deberían reducir drásticamente sus
trámites burocráticos, y ofrecer un clima de negocios por lo menos tan
amigable con el capitalismo como el de China comunista.
Source: Andrés Oppenheimer: 'Latinoamérica, ¿más comunista que China?' |
Diario de Cuba -
http://www.diariodecuba.com/internacional/1447692068_18169.html
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario