El béisbol, el fútbol y las pasiones desbordadas
Lunes, Octubre 29, 2012 | Por Orlando Freire Santana
LA HABANA, Cuba, octubre, www.cubane.org -La Fundación Alejo Carpentier
acaba de ser sede de un ciclo de conferencias titulado "Se complica el
inning: deporte y cultura en Cuba", el cual tuvo como plato fuerte al
béisbol, desde su aparición en nuestro país hasta la actualidad. La
última de las conferencias, bajo el título de "La pelota en el ser
cubano", fue impartida el pasado 23 de octubre por el destacado escritor
y periodista Leonardo Padura.
Más de 200 personas abarrotaron el patio central de la referida
Fundación, deseosas de escuchar una opinión tan autorizada como la de
Padura, gran conocedor de nuestro deporte nacional, y sobre todo un
escritor que mantiene una posición independiente con respecto a la
cultura oficialista. Y no hizo quedar mal el conferencista al público
presente, ya que trató acerca de todos los males que afligen a nuestro
béisbol, y que se reflejan en los pobres resultados internacionales
obtenidos por los peloteros de la isla.
Después de referirse al desarrollo del béisbol durante las etapas
colonial y republicana, muy vinculado a nuestra identidad nacional, el
novelista entró en el tema que todos esperaban: el devenir de la pelota
a partir de 1959. Padura afirmó que la prohibición del béisbol
profesional en Cuba, hacia 1962, creó una fractura que mucho afectó la
base organizativa e institucional de ese deporte. Estadísticas borradas,
figuras a las que se intentó sumir en el ostracismo, y representaciones
tratadas de suprimir de la preferencia popular— los famosos duelos entre
el Habana y el Almendares, por ejemplo— fueron algunas de las acciones
emprendidas por las nuevas autoridades deportivas del país. Solo una
verdadera pasión nacional, como lo es el béisbol, fue capaz de
recuperarse y superar parcialmente el marasmo al que lo habían llevado.
Sin embargo, nuevos obstáculos se impondrían en el camino del béisbol
cubano: la carestía de sus implementos (pelotas, guantes, bates etc.),
lo que dificulta su práctica masiva por niños y jóvenes; la creciente
deserción de peloteros establecidos en las series nacionales; y
últimamente los escasos espacios televisivos con que cuenta el deporte
de las bolas y los strikes. En este último punto, Padura fustigó a
nuestra televisión por no ofrecer los juegos de las Grandes Ligas de los
Estados Unidos, y por el contrario saturarnos de fútbol internacional.
Casi al término de su conferencia, el novelista incluyó un párrafo que
recibió un cerrado aplauso de los presentes: "No está mal que nuestros
jóvenes celebren los goles de Cristiano Ronaldo y Lionel Messi, así como
también las buenas jugadas de Yuliesky Gourriel y Frederick Cepeda;
pero, en el fondo de nuestros corazones, anhelamos que puedan estar al
tanto de los jonrones de Yoenis Céspedes y Kendry Morales". Reconozco
que, al escuchar esas palabras, vino a mi mente aquella sabia sentencia
martiana: injértese en nuestras repúblicas el mundo, pero el tronco ha
de ser el de nuestras repúblicas.
Una vez comenzada la participación del público, hubo consenso en que
semejante avalancha de fútbol en nuestros medios de difusión, en
detrimento del béisbol, perjudica a nuestro deporte nacional, en
especial con el desarraigo beisbolero que ha producido en la población
menor de 20 años. Uno de los asistentes contó que, en días pasados,
observó que cinco grupos de jóvenes se disputaban el espacio de un
céntrico parque capitalino. Y todos los muchachos practicaban el fútbol;
ninguno jugaba béisbol, ni siquiera uno de esos pitenes con peloticas de
goma, donde no hacían falta los bates y los guantes. No solo se pierden
talentos, sino que además se dañan la tradición y la cultura cubanas.
Por supuesto, los grandes ausentes de esa tarde en la Fundación Alejo
Carpentier fueron los directivos de la televisión y sus mentores: el
aparato de poder en la isla. Ellos siguen aferrados a la idea de que los
cubanos no nos enteremos del desempeño de nuestros atletas que han
decidido competir libremente allende los mares.
http://www.cubanet.org/articulos/el-beisbol-el-futbol-y-las-pasiones-desbordadas/
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario