Transexuales, el eslabón más débil
Son marginados tanto por la sociedad como por las leyes
Domingo, mayo 29, 2016 | Manuel Díaz Mons
LA HABANA, Cuba.- El desconocimiento y el miedo a lo distinto ha
provocado que en Cuba, como en muchos países de América Latina, la
realidad de la comunidad transexual se vea envuelta en marginalidad,
peligro y prostitución. Los infaustos prejuicios gubernamentales y
sociales han logrado mantener a esta minoría en la exclusión y el rechazo.
Lucy, una transexual cubana que vivió el desprecio en carne propia y se
vio obligada a marchar hacia Canadá, donde vive hace más de 10 años,
cuenta desde su blog la difícil historia que le tocó vivir por el simple
hecho de ser "distinto".
"Una sociedad como la que ha hecho posible casi todos mis sueños dista
de ser perfecta, pero se acerca mucho más a lo que aspiraba y que me
prometieron en el sitio en que nací. Allí la ideología va por delante",
señaló en su web.
Apertura con muchas trabas
La primera operación de cambio de sexo en Cuba ocurrió el 22 de mayo de
1988 a quien después asumiría el nombre de Mavi Susel. Las operaciones
de readecuación genital fueron aprobadas oficialmente por el gobierno de
la Isla el 4 de junio de 2008 mediante la Resolución 126 del Ministerio
de Salud Pública (MINSAP), que dice expresamente: "Crear el Centro de
Atención para la Salud Integral de las Personas Transexuales, como la
única institución del Sistema Nacional de Salud, autorizada para
realizar tratamientos médicos totales o parciales de reasignación sexual".
Estas intervenciones quirúrgicas, pese a sus altos costos, se realizan
gratuitamente en la Isla para las personas estrictamente seleccionadas
por el Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX).
La máster en ciencias Mayra Rodríguez señaló en una conferencia titulada
Trastornos de la identidad de género, diagnóstico y acompañamiento
psicológico que el proceso de estudio en la institución hasta llegar al
dictamen demora más de dos años.
"Todo esto lleva un estudio y seguimiento psicológico, un tratamiento
hormonal, luego se da comienzo de una vida al paciente como miembro del
sexo al que se siente pertenecer (Incluye cambio de documento de
identidad) y posteriormente una cirugía de reasignación genital", señala
el informe.
El CENESEX tiene establecido que toda persona que acuda a la institución
para la "Reasignación Sexual", tiene que tener en cuenta todo el
proceso, según explica el documento emitido por el Servicio de atención
a personas transexuales.
"En primer lugar recibirá dos citas, la primera para iniciar las
entrevistas con el equipo psicológico del Centro y la segunda para
realizar su historia clínica y exploración física por parte del equipo
endocrinológico", refiere el escrito.
El Dr. Ramiro Fragas Valdez, uno de los principales médicos en estos
temas dentro de Cuba, en su conferencia Aspectos quirúrgicos de la
transformación del hombre en mujer, dada cuando el gobierno decidió
volver a retomar estas operaciones, señala que la cirugía de
reasignación sexual o genitoplastia a personas transexuales es muy
compleja y necesita de un equipo multidisciplinario que va desde el
trabajador social, especialistas de salud mental, juristas,
endocrinólogos, clínicos, sexólogos y cirujanos.
Como en Cuba todavía no existe una ley que respalde estas operaciones de
cambio de sexo, el CENESEX coordina todos los procesos con el Ministerio
de Justicia para facilitar la documentación necesaria para el cambio de
identidad, pues la ley cubana actual solo asigna la identidad sexual de
la persona según la forma de sus genitales.
"Todo esto es un largo proceso entre trámites y consultas. Son
afortunados los que llegan al final de todo ese camino", comenta Roberto
Díaz, un miembro de la comunidad LBGT (Lesbianas, Bisexuales, Gays y
Transexuales) en Cuba.
"En mi opinión, todas estas acciones las realizan para subsanar los
grandes errores que cometió el gobierno cubano a partir de 1959 con los
que tenían gustos diferentes a los establecidos por la ley", añadió.
Discriminación social: un tema por debatir
La tesis doctoral de Mariela Castro (2014), directora del CENESEX,
señala que la postura de la sociedad cubana actual, a través de sus
instituciones, se caracteriza por la desprotección hacia estas personas,
lo que es perjudicial para el funcionamiento de la sociedad.
"La desigualdad social de las personas transexuales en Cuba se expresa
en violencia física y psicológica, problemas de salud, elección del
trabajo sexual, nivel educacional por debajo de la media nacional,
limitadas opciones de trabajo, desvinculación familiar, situación
habitacional con dificultades, limitadas intervenciones sociales por el
insuficiente reconocimiento de las necesidades de este grupo, falta de
información y la existencia de barreras sociales al proceso de
integración de estas personas", señala el texto.
En esta tesis también refiere que un gran porciento de los transexuales
en el país no tiene participación dentro de la sociedad cubana, ni
siquiera en la toma de decisiones.
Por otra parte, Jordan Ajete, joven estudiante universitario, considera
que la aceptación a los homosexuales y bisexuales se ha acrecentado
bastante en los últimos años, pero no cree que haya ocurrido lo mismo
con los transexuales. "Espero que en un futuro sean aceptados como los
demás", afirmó.
Sin embargo, algunas personas como Gilberto Hernández, un veterano
miembro de la comunidad LGBT, considera que no ve necesario un cambio de
sexo para que a una persona le guste otra del mismo género.
"Para mí solo es un trastorno de personalidad, aunque en la comunidad
LGBT son bien aceptados y respetados; sin embargo, en la calle no sucede
esto", comentó, concluyendo que "mientras las leyes cubanas no respalden
a los que tienen orientación sexual diferente, nada en Cuba cambiará".
Mariette Pathy, una reconocida fotógrafa extranjera que vino a la Mayor
de las Antillas para una serie de obras titulada "TransCuba", en una
entrevista para el sitio Cibercuba expresó que lo principal, según su
punto de vista, es que deben legislarse dos leyes para que cuando una
persona pase de un género a otro pueda cambiar su nombre de nacimiento y
puedan tener la libertad de trabajar en cualquier campo que quieran.
"Los maestros y los estudiantes deben aprender a aceptar, en lugar de
intimidar a las personas que son diferentes a ellos. Pero creo que lo
mismo puede decirse para todos los países del mundo", añadió.
La Asamblea Nacional aún sigue haciendo caso omiso a las recomendaciones
que realiza la propia hija del general-presidente. El gobierno cubano
votó a favor de la resolución presentada en el Consejo de Derechos
Humanos a favor de la Comunidad LGBT, pero aún sus leyes no legalizan la
situación marital de miles de personas que viven en tal situación.
Wendy Iriepa, una de las transexuales beneficiadas con la operación de
cambio de sexo, en una entrevista a un medio independiente afirmó:
"Estamos abiertas a todo el que quiera conocernos y ver que no somos
monstruos; que no hemos roto las normas sociales porque hemos querido
sino porque somos así y debemos ser respetadas; que merecemos un lugar y
que se nos mire no como bichos raros, sino como personas de esta
sociedad, personas de estos tiempos".
Mientras tanto, Lucy, la transexual cubana residente en Canadá, se
dedica a buscar apoyo para los suyos. "Solo pido que, antes de
ridiculizar a una persona transexual, recuerden que no han vivido los
dolores de esa vida y que no entenderán nunca lo que han pasado esas
personas tan dignas de respeto y amor".
Source: Transexuales, el eslabón más débil | Cubanet -
https://www.cubanet.org/mas-noticias/transexuales-el-eslabon-mas-debil/
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