La escritora en entrevista exclusiva con martinoticias.com dijo acerca
de Cuba: "ya es un régimen que tiene demasiados años y que hace mucho
tiempo debió haber cambiado".
Gricel Gonzalez/martinoticias.com 02 de diciembre de 2011
Los cubanos están más cerca del alma de la escritora latinoamericana más
leída del mundo de lo que ellos mismos pueden imaginar.
Tan temprano como en su primer artículo, publicado en el año 1967,
"Maridos" (donde describe las categorías de maridos: el americano, el de
la fulana, el de la película, el enamorado de su mujer, el infiel, entre
otros) se atreve a pensar en el marido cubano: "El Marido Latino. No
confundir con "amante latino", su antónimo. Estos maridos varían según
sean mexicanos, italianos, bolivianos, cubanos o chilenos. El factor
común es que desean a la mujer del prójimo".
Martinoticias.com se aproxima a esta autora chilena para acercarla, a su
vez, sus lectores cubanos.
En Cuba tus novelas pasan de mano en mano hasta terminar muy gastadas.
¿Alguna vez has tenido contacto con los lectores de la isla o has
buscado la manera de acercarte a ellos?
Sí, claro que sí. Me han escrito lectoras, hasta ahora no tengo ningún
lector cubano y cuando puedo mando libros con cualquiera que viaje, que
vaya, y así circulan un poco. Tengo una inmensa simpatía por los cubanos
dentro y fuera de Cuba, la gente más simpática de la tierra y tan
cariñosos, oye.
Me dicen lo difícil que es conseguir el libro. A veces es una persona
que está tratando de ser escritora o alguna persona que simplemente me
cuenta de su familia o de ella misma.
¿Has pensado ir a la Feria del Libro en Cuba?
Mira no he pensado ir a la feria, he ido a Cuba 3 o 4 veces ya, fue de
turismo hace mucho tiempo, y como le pasa a todo el mundo que va a Cuba,
se enamora de la gente.
¿Qué piensa de la situación en Cuba?
No estoy de acuerdo con que exista un régimen policial, una dictadura de
ninguna clase en ninguna parte. Ahora, Cuba es un país que ha obtenido
grandes resultados en ciertas áreas y yo no sé si el pueblo cubano
votara hoy en Cuba, si votarían por un gobierno muy distinto, no sé.
Pero no soy cubana, no vivo en Cuba y no puedo opinar, la gente me
pregunta lo mismo de Venezuela. Cómo voy a opinar sobre Venezuela si no
estoy viviendo allá?. Todos mis amigos venezolanos son antichavistas y
son gente de izquierda, eso ya me dice algo, pero yo no estoy ahí, y sé
que Chávez ha hecho mucho por ciertos sectores del pueblo. Lo mismo creo
que en Cuba se ha hecho mucho, ahora, ya es un régimen que tiene
demasiados años y que hace mucho tiempo debió haber cambiado.
A la autora chilena con más de 51 millones de libros vendidos le resulta
difícil hablar de ella misma. En su página oficial de Internet dice que
"es muy extraño escribir su propia biografía, porque es tan solo una
lista de fechas, eventos y logros. En realidad, las cosas más
importantes de mi vida pasaron en las cámaras secretas de mi corazón y
no pertenecen en una biografía".
Basado en este testimonio le pregunté: ¿Cómo el corazón de Isabel
Allende la describiría?
Ja, qué linda pregunta - dijo con una inmensa simpatía y una sencillez
admirable - Es tan difícil, he escrito dos memorias tratando de
encontrar quién soy. Y es difícil porque uno cambia con los años. Yo
diría que soy una persona sentimental, emotiva, apegada a mi familia y a
mis amigos, leal, soy orgullosa, trabajadora. Más o menos esa sería mi
definición.
¿Se describiría también como matriarca?
La gente me define como apasionada, aunque en realidad no sé lo que
quiere decir apasionada. En verdad he sido una matriarca de mi tribu, de
mi pequeña tribu, mi familia. Pero sabes que con el tiempo los niños
crecen, se van al college (universidad) y más o menos se desparrama la
familia por un tiempo, así que ya no me siento tan matriarca, estoy más
vieja también.
Su fortaleza la ha demostrado a través de su vida. Una mujer que se
despojó de la doble moral cuando hablar de sexo, feminismo y de mujeres
infieles era un escándalo y un desacato a la sociedad. Su artículo
Entrevista A Una Mujer Infiel, publicado también en la revista chilena
Paula en el año 1967 fue en su momento, una bomba de tiempo que rompió
con los esquemas de la época.
¿Cuándo fue que por primera vez sintió esa necesidad de escribir?
Siempre me gustó contar historias, siempre me gustó mucho leer y
escribir, pero en la generación en que yo nací y en el lugar donde yo
nací, no había modelos de escritoras que uno pudiera decir: ah, yo
quiero ser como ella. Las escritoras que uno conocía eran unas señoras
inglesas que se habían muerto hacía tiempo, que generalmente se habían
suicidado, no eran ningún modelo para uno. Entonces no pensé nunca que
yo podría ser escritora, pero me acerqué a la escritura a través del
periodismo. Sin haber estudiado periodismo, empecé muy temprano a
ejercerlo cuando comenzó la televisión en Chile, que fue en los años 60.
Se fue dando casi naturalmente.
¿Cómo comienza ese proceso de escribir?
Creo que cada libro nace como una semilla que la llevo en la barriga, no
la llevo en la cabeza, ni siquiera sé que la tengo ahí. Esta semilla
empieza a germinar, a crecer y empiezo ya a pensar en un tema porque lo
tengo adentro y ese tema siempre está relacionado con algo que me
importa mucho, o algo que me ha ocurrido, o algo de mi propia alma que
necesito explorar. Cuando empiezo el libro no sé de qué se trata y
tampoco sé qué es lo que estoy buscando. Muchas veces es después que el
libro ha sido publicado y leo alguna crítica o viene alguna profesora o
alguna estudiante y me dicen lo que ellos interpretaron del libro y
entonces yo me doy cuenta: bah, es cierto, eso era lo que yo estaba
buscando.
¿Qué representa la familia para Isabel Allende?
Mira, yo he sido siempre extranjera, fui hija de diplomáticos, así que
pase la infancia viajando; por lo tanto sin más familia que mi madre, mi
padrastro y mis hermanos. Después fui exiliada política por 13 años en
Venezuela y después fui emigrante en los Estados Unidos, que ya llevo
25 años aquí. Entonces siempre he viajado sola, he estado sola y en cada
lugar donde me instalo, he tratado de formar una familia porque para mí
es esencial. Creo que es la base de la comunidad, la base de la salud
mental también. En una familia bien organizada la gente se ayuda, nadie
está solo, si uno tiene un bebé, si estás enfermo, si estás viejo,
siempre hay ayuda y siempre hay motivos para celebrar. Entonces en mi
familia tenemos todas esas tradiciones latinoamericanas, chilenas, de
juntarnos en una mesa grande, de celebrar todos los cumpleaños. Cada
cosa que pasa la celebramos y siempre que hay alguna necesidad, alguien
está ahí para ayudar.
¿Viven cerca?
Vivimos muy cerca. Nicolás mi hijo, vive a tres minutos de distancia y
Juliette que es como hija mía, que es mi asistente, vive a diez minutos
de distancia y así estamos todos juntos. La única que está lejos es mi
mamá que vive en Chile. Pero me escribo con ella todos los días sin
falta o la llamo por teléfono y la voy a ver por lo menos 3 veces al año.
¿Qué representa para Isabel Allende su madre?
Mi mamá es el amor más antiguo y más sólido de mi vida. Es la persona
que más me ha querido incondicionalmente antes de que yo naciera. Ha
sido mi amiga, mi compañera, mi cómplice, durante todos los años que he
vivido, así es que ha sido para mí importantísimo que ella me escriba,
porque hemos estado separadas casi siempre. Pero el hecho de que ella me
escriba todos los días nos ha mantenido muy cerca y además es como
llevar un diario de la vida, entonces yo sé todo lo que le ha pasado a
ella, sé todo lo que ha pasado en todos estos años también porque está
contado en el día. Y tengo un closet lleno de cartas de mi madre,
organizado por años, si yo necesito digamos escribir una memoria sobre
lo que pasó en los últimos diez años, saco las últimas diez cajas y ahí
está todo. Es muy linda esa relación.
¿Cuáles son las palabras más importantes que ella le haya dicho?
"Pase lo que pase yo siempre estoy aquí contigo", yo creo que mi mamá
cuando se muera (tiene 91 años) seguramente se va a morir antes que yo,
va a seguir conmigo, va a estar siempre conmigo.
http://www.martinoticias.com/noticias/El-alma-cubana-de-Isabel-Allende-134900238.html
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