Tras una semana de marchas por las calles de La Habana, las Damas de
Blanco se consolidan como el rostro más visible y público de la disidencia.
Redacción CE, Madrid | 22/03/2010
Ayer domingo concluyó una semana de marchas de las Damas de Blanco por
el séptimo aniversario de la Primavera Negra de 2003. Laura Pollán,
líder de las mujeres, comentó a la prensa: "Espero que sean los últimos
(días), que el año que viene no haya octavo aniversario".
Medio centenar de mujeres asistió a una misa en la iglesia de Santa
Rita, en Miramar. Diplomáticos de Alemania, Suecia, Italia, Reino Unido,
República Checa, Polonia, Hungría, EE. UU. y el consejero político de la
embajada española, Carlos Pérez-Desoy, asistieron al oficio religioso
Las Damas de Blanco marcharon posteriormente por la Quinta Avenida hasta
la Calle 42, donde se encuentra la sede de la Asamblea Nacional del
Poder Popular. Se repitió el ritual de días anteriores: marcha,
contramarcha de "espontáneos" ciudadanos indignados, cordón policial
para "protegerlas". Una perfecta coreografía que sólo permite la
violencia verbal, excepto al final de la marcha, cuando al tomar el
ómnibus las mujeres sufrieron algunos empujones.
Durante toda la semana de marchas, el comportamiento del público que las
veía pasar ha sido idéntico: no se sumaban a su marcha, pero tampoco al
mítin de repudio.
La portavoz de las Damas de Blanco en Europa, Blanca Reyes, pidió en
Madrid a Miguel Ángel Moratinos, ministro de Asuntos Exteriores, el
mantenimiento de la posición común europea. Suavizarla supondría un
espaldarazo a la dictadura.
http://www.cubaencuentro.com/es/cuba/noticias/la-semana-de-las-damas-de-blanco-231890
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